Llegaste a mi vida por suerte
Partiste en un abrir y cerrar de ojos
Tu presencia inundó mi otoño de sol
Tu amor fue una saeta ardiente de calor
Fuiste breve, pero intensa
Pudiste revivir este frío corazón
Tu recuerdo vive dentro mío
Tus enseñanzas van más allá de la razón
Amándote fui libre
Viviendo conmigo me llenaste de color
El destino quiso separarnos
Pero nunca podrá relegarte
Ni siquiera en mi último estertor
Gracias por tu compañía
Gracias por tu luz
Gracias
Gracias
Sólo gracias, fuiste una bendición
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